En la semana pre-carnavalesca ud puede calentar el paso de baile y conocer mejor la ciudad. Durante el día, algunos museos ofrecen un panorama de la cultura popular y de los orígenes del carnaval local. Para entender mejor sobre el principal ritmo del carnaval local, el Museo Paço do Frevo es, además de museo, un centro de documentación, investigación y salvaguarda del frevo, que es patrimonio inmaterial de la humanidad (UNESCO). En el centro de la ciudad, pase por el Patio de San Pedro para admirar la bellísima y recién restaurada Concatedral de San Pedro de los Clérigos. Allí, conozca la historia del Mangue Beat en el Memorial Chico Science y las exposiciones del Núcleo Afro de Recife. En la casa en que se fundó uno de los más tradicionales bloques de carnaval de la ciudad, el Batutas de San José, está el Bar Buraco del Sargento, con fotos antiguas e delicias regionales. Si desea almorzar, en el patio hay restaurantes tradicionales como el Buraquinho y el Bangué. Si puede llegar hasta el barrio de Casa Forte, no deje de conocer el Museo del Hombre del Nordeste, donde hay un poco sobre la historia y cultura de la región, incluyendo piezas del legendario Maracatu Elefante, fundado en el año 1800. Durante la noche,el Martes Negro ofrece encuentro de atracciones como maracatus, coco y afoxé en el Patio de San Pedro.
El jueves de la semana anterior ya tiene el Gallo Gigante montado en el puente y parte de las calles del centro ya están prohibidas para coches, siendo una buena oportunidad para explorar el centro a pie. Disfrute de conocer algunas iglesias que son verdaderos tesoros artísticos como la Capilla Dorada, la Basílica del Carmen y la Concatedral de San Pedro de los Clérigos. Transite por el camelódromo entre disfraces y aderezos para garantizar un look especial para la fiesta. En el barrio de San José, vale una visita al Fuerte das Cinco Pontas, que alberga el Museo de la Ciudad de Recife. En frente del fuerte, un famoso mosto de caña de azucar ayuda a refrescar la caminata. Siga por la Calle das Calçadas hasta el Mercado de San José con sus frutas, verduras, condimentos, hierbas, artesanía y su vecina Basílica de la Penha. Por la noche, el destino es el Marco Cero, para asistir al espectáculo Tumaraca, un encuentro de 500 batuqueros de maracatu, abriendo alas para el carnaval, regidos por 13 maestros de maracatu nación en homenaje a Naná Vasconcelos.